Mamografía: Lo que toda mujer debe saber

Una mamografía es un examen utilizado para detectar cualquier anomalía o cambio en las mamas femeninas. Las mamografías utilizan dosis bajas de rayos X y se realizan rutinariamente a las mujeres para detectar el cáncer de mama.

Sin embargo, algunos tipos de cáncer de mama no pueden detectarse mediante mamografías, pero sí mediante un examen manual de las mamas. Tenga en cuenta que los exámenes periódicos de las mamas son muy importantes para detectar precozmente cambios en el tamaño y la forma de las mamas, secreción del pezón, dolor o incluso la presencia o no de bultos en las mamas.

Tipos de mamografías para el cáncer de mama

• Mamografías de cribado: se realizan como control rutinario a las mujeres de cierta edad. Se realizan para diagnosticar cualquier posible cambio en el tejido mamario que pueda conducir a la detección del cáncer de mama en sus primeras fases. Las mujeres que se someten a mamografías de cribado no suelen presentar signos ni síntomas.
• Mamografías de diagnóstico: se utilizan para comprobar y diagnosticar el cáncer de mama cuando se detecta un cambio en la forma y el tamaño de la mama, así como cuando se palpa algún bulto. Las mamografías de diagnóstico duran más tiempo que las de cribado, ya que intentan visualizar y detectar mejor los cambios en el tejido mamario. Normalmente, durante una mamografía diagnóstica se toman más imágenes de las mamas desde distintos ángulos.

Qué ocurre durante una mamografía

Por lo general, la mamografía no dura más de 20 minutos. Deberá permanecer de pie frente a una máquina especial de rayos X mientras se examinan sus mamas de una en una. Las mamas se colocan entre la placa de rayos X y una placa de plástico para extender el tejido mamario y obtener la mejor imagen de su tejido mamario. Es normal sentir cierta molestia, pero sólo durará unos segundos. Normalmente se toman dos imágenes de cada mama, una desde arriba y otra desde el lateral.

¿Con qué frecuencia debe hacerse una mujer una mamografía?

Las mamografías son imprescindibles para toda mujer. Normalmente, una mujer menor de 50 años debe consultar con su médico cuándo y con qué frecuencia debe hacerse una mamografía. Si existe un mayor riesgo de cáncer de mama, o si aparece algún signo o síntoma, debe repetirse la mamografía con frecuencia para detectar el cáncer de mama en sus primeras fases. Para las mujeres de 50 a 75 años, se recomiendan mamografías una vez cada dos años.

Mamografías e implantes mamarios

Independientemente de si tiene pechos naturales o implantes mamarios, las mamografías son imprescindibles. Cuando se prepare para las mamografías, debe informar al técnico y al radiólogo de que tiene implantes mamarios. En muchos casos, los implantes mamarios ocultan el tejido mamario real, lo que dificulta su visualización y examen.

Mamografías: Cómo prepararse

Las mamografías son exámenes dolorosos que no duran más de 20 minutos. Sin embargo, a veces, en los casos de mamografías diagnósticas, pueden durar más tiempo.

Si tiene implantes mamarios, no olvide informar al técnico y al radiólogo de que lleva implantes mamarios.

Evite hacerse una mamografía durante el periodo menstrual y una semana antes del mismo. Normalmente, durante el periodo premenstrual los pechos están más hinchados y sensibles, lo que hará que duelan más durante una mamografía (Lea también: Zona vaginal hinchada). Si la mamografía se realiza después del período menstrual, el examen en sí dolerá menos y la visualización del tejido mamario será mejor.

Llévese siempre radiografías antiguas para compararlas con las nuevas.

Evite llevar vestidos cuando vaya a hacerse una mamografía. Se sentirá más cómoda si puede desvestirse de cintura para arriba.

Evite los desodorantes, perfumes y polvos bajo los brazos y en los senos, ya que a veces pueden crear sombras e interferir con la imagen normal de su tejido mamario (Aprenda también: Higiene genital).