Reconstrucción del suelo pélvico

¿Qué es la reconstrucción del suelo pélvico?

La cirugía reconstructiva del suelo pélvico consiste en varios procedimientos para corregir una afección llamada "prolapso de órganos pélvicos". El procedimiento puede consistir en la pared vaginal anterior (parte delantera de la vagina) o posterior (pared posterior de la vagina). También puede extirparse el útero en lo que se denomina histerectomía. Si ya se ha sometido a una histerectomía, la parte superior de la vagina puede levantarse y sujetarse.

¿Qué es la disfunción del suelo pélvico?

El suelo pélvico está formado por músculos, ligamentos, tejido conjuntivo y nervios que sostienen y controlan el recto, el útero, la vagina y la vejiga. Este "suelo" puede resultar dañado por el parto, el levantamiento repetido de objetos pesados, enfermedades crónicas o intervenciones quirúrgicas. La disfunción del suelo pélvico puede provocar, entre otras cosas:

• Incontinencia: pérdida del control de la vejiga o los intestinos y escape de orina o heces.
• Prolapso: descenso de los órganos pélvicos, incluidos el útero, la vejiga, la vagina o el recto. Alrededor del 35% de las mujeres desarrollarán alguna forma de prolapso de órganos pélvicos.
• Trastornos del vaciado: dificultad para orinar o defecar.
• Dolor pélvico: molestias, ardor u otros síntomas pélvicos molestos, incluido el dolor de vejiga o uretra.
• Vejiga hiperactiva: necesidad frecuente de orinar, presión incómoda en la vejiga, incontinencia de urgencia y dificultad para mantener la vejiga llena.

¿Quién necesita una reconstrucción del suelo pélvico?

Cuando los músculos del suelo pélvico se dañan o debilitan -a menudo debido al parto- a veces son incapaces de soportar el peso de algunos o todos los órganos pélvicos y abdominales. Si esto ocurre, uno o más de los órganos pueden descender (prolapso) por debajo de su posición normal, provocando síntomas como molestias, dolor, presión e incontinencia urinaria.
El objetivo de la reconstrucción del suelo pélvico es restaurar la estructura y función normales de los órganos pélvicos femeninos.
Alrededor del 35% de las mujeres desarrollan alguna forma de prolapso de órganos pélvicos. Esta afección puede tratarse a menudo con terapias no quirúrgicas, pero a veces requiere cirugía reconstructiva del suelo pélvico. La pericia y habilidad del médico son muy importantes en estos procedimientos ginecológicos.

¿Cuáles son los tipos de reconstrucción del suelo pélvico?

Usted y su cirujano determinarán qué tipo de cirugía vaginal se adapta mejor a sus necesidades en función de su estado. Los tipos de reconstrucción del suelo pélvico incluyen:

• Reparación vaginal anterior- Este tipo de cirugía tiene por objeto reparar las paredes debilitadas entre la vejiga y la pared vaginal. La reparación vaginal anterior corrige los abultamientos vaginales y mejora el control de la vejiga. Se practica una incisión en la pared anterior de la vagina. Las capas debilitadas se tensan mediante puntos de sutura. A veces se extirpa tejido sobrante.
• Reparación vaginal posterior- Este tipo de cirugía vaginal repara el tejido débil que divide la vagina y los intestinos. La incisión se realiza en el centro de la pared posterior de la vagina. El tejido debilitado se repara o se tensa con puntos absorbibles.

¿Cuánto dura la cirugía del suelo pélvico?

La intervención dura entre 30 y 60 minutos. Antes de la intervención, el cirujano le explicará las ventajas y los riesgos de la misma. A continuación, acudirá al anestesista.

¿Cuánto dura la recuperación tras una reconstrucción del suelo pélvico?

Cuando se despierte de la operación, es posible que tenga una sonda y un tapón vaginal para disminuir la hemorragia. Pueden retirarse a las 24 horas. La recuperación completa tarda unos 3 meses. Durante este tiempo evite levantar objetos pesados o realizar actividades extenuantes para evitar que el prolapso se repita. Al cabo de unas 3 semanas podrá retomar sus actividades normales, pero a un ritmo pausado. No mantenga relaciones sexuales durante las primeras 6 semanas.
Mientras se recupera, asegúrese de seguir una dieta sana y equilibrada, rica en fibra. Esto le ayudará a ablandar las heces. Intente añadir frutas y verduras a su dieta. El esfuerzo excesivo para defecar puede afectar a la incisión.