Exámenes pélvicos

Un examen pélvico es un examen físico completo de la cámara de los órganos pélvicos de una mujer realizado por un profesional sanitario. Un examen pélvico ayuda al profesional sanitario a evaluar el tamaño y la posición de la vagina, el cuello uterino, el útero y los ovarios. Es una parte importante de la atención sanitaria preventiva para todas las mujeres adultas. Un examen pélvico se realiza para ayudar a detectar ciertos tipos de cáncer en sus fases iniciales, infecciones, infecciones de transmisión sexual (ITS) u otros problemas del aparato reproductor.

Por qué se hace

Puede realizarse un examen pélvico:

- Como parte de la revisión física periódica de la mujer. La prueba de Papanicolaou puede hacerse durante el examen pélvico. Para más información, vea el tema Prueba de Papanicolaou.
- Para detectar infecciones vaginales, como infecciones por hongos o vaginosis bacteriana.
- Para ayudar a detectar infecciones de transmisión sexual (ITS), como clamidia, herpes, gonorrea, tricomoniasis o virus del papiloma humano (VPH).
- Para ayudar a determinar la causa de una hemorragia uterina anormal.
- Para evaluar anomalías de los órganos pélvicos, como fibromas uterinos, quistes ováricos o prolapso uterino.
- Para evaluar el dolor abdominal o pélvico.
- Antes de prescribir un método anticonceptivo. Algunos métodos anticonceptivos, como el diafragma o el dispositivo intrauterino, requieren un examen pélvico para asegurarse de que el dispositivo se ajusta correctamente.
- Recoger pruebas en casos de sospecha de agresión sexual.

Antes de un examen pélvico:

- Intente programar el examen cuando no tenga la menstruación, ya que la sangre puede interferir con los resultados de una prueba de Papanicolaou. Pero si tiene un flujo vaginal nuevo o un dolor pélvico nuevo o en aumento, puede hacerse un examen pélvico mientras tenga la regla.
- No utilices duchas vaginales, tampones, medicamentos vaginales ni aerosoles o polvos vaginales durante al menos 24 horas.
- No mantenga relaciones sexuales durante las 24 horas anteriores al examen si tiene flujo vaginal anormal.

Al principio de la visita, informe a su profesional sanitario:

- Si está o pudiera estar embarazada.
- Si tiene algún síntoma reproductivo o del tracto urinario como picor, enrojecimiento, llagas, hinchazón o un olor inusual o aumento del flujo vaginal. Si se ha estado realizando autoexámenes vaginales con regularidad, comente cualquier cambio que haya notado con su profesional sanitario. Para más información, consulte la prueba médica Autoexamen vaginal (AVE).
- Si está utilizando un método anticonceptivo.
- Si es su primer examen pélvico.
- El primer día de su último período menstrual y cuánto duró.
- Si se ha sometido a una intervención quirúrgica u otros procedimientos, como radioterapia, que afecten a la vagina, el cuello uterino o el útero.

Si ha tenido problemas con exámenes pélvicos en el pasado o ha sufrido violaciones o abusos sexuales, hable con su profesional sanitario sobre sus preocupaciones o temores antes del examen.

No son necesarios otros preparativos especiales antes de someterse a un examen pélvico. Para su comodidad, puede vaciar la vejiga antes del examen.